Luego de la masiva convocatoria de la Mesa de directorxs y la conferencia de prensa del pasado 4-9, uno de cuyos puntos centrales fue la de puesta en marcha inmediata del Consejo Asesor y la Asamblea Federal, Ralph Haiek pretende convocar en Bariloche, el 4-10 a los asambleístas de la AF, órgano de co-gobierno del INCAA, y presionarlos para que aprueben su balance 2018.
Ante una solicitud de información pública sobre sus gastos, el INCAA respondió con una serie de datos que contienen graves omisiones y faltas.
▶ – OCULTAMIENTO DE INFORMACIÓN
El ejecutivo del INCAA entregó solamente los montos totales por rubro, y ningún detalle al interior de los mismos. El balance menciona el gasto total perono los gastos particulares. Dicho detalle debería constar en los registros administrativos del INCAA, como ocurre en toda institución pública, por lo que no entendemos la razón de negárselos a la Asamblea Federal y a la comunidad cinematográfica en su conjunto. Publicarlos garantizaría transparencia en el manejo de los fondos del Estado.
Tampoco hay información detallada sobre quiénes son los beneficiarios de los subsidios a la producción con montos y títulos de películas. También se hace imposible determinar si la misma película se está imputando en años sucesivos y siendo contada como una nueva producción.
Tampoco existe lista de proveedores conforme los montos facturados. No hay forma de saber cuáles son los gastos en viajes al exterior de funcionarios, ni los destinos de dichos viajes. Ni los gastos en publicidad institucional.
▶ – DESVÍO DE FONDOS
La observación de los números entregados por el ejecutivo del INCAA dejan ver con claridad que el INCAA no está utilizando los fondos para lo que es su legítima: el Fomento de la Cinematografía, y por ello incurre en Desvío de Fondos Públicos, lo cual está penado por la Ley.
Hay más dinero gastado en el rubro Pasajes y Viáticos (que incluye viajes de funcionarios) que en Créditos a la producción de películas, para tomar solo un ejemplo de muchos desbalances. El INCAA no es una agencia de empleo para gerentes ni una empresa de servicios turísticos, y su actividad central debe estar dedicada al cine, y particularmente al cine independiente, que no tiene otro tipo de financiamiento. El desvío de fondos públicos es una violación a la ley, y quien convalide o legitime esta situación se convierte, a efectos legales, en cómplice.
▶ – CREDITOS y SUBSIDIOS
En 2018 y 2019 no se otorgó ni un solo crédito a la producción de cine, ni se designó ningún comité de crédito para tal fin. Tampoco se aplicó a subsidios a películas nacionales el porcentaje que exige la ley.
Se extrajo del Fondo de Subsidios el dinero de financiamiento, cuando la ley establece claramente que 50% deberá ser destinado a Subsidios y del otro 50% deberá garantizarse el dinero necesario para financiar los films declarados de interés, ya sea a través de la modalidad de ventanilla continua o concurso.
Esta sub-ejecución se hace evidente porque el patrimonio del INCAA aumentó del año 2017 a 2018. El enmascararlo sumando otras partidas o inventando anticipos no libera a las autoridades de las responsabilidades penales por estos desmanejos.
▶ – SUBEJECUCION y GASTOS SUPERFLUOS
Después de sub-ejecutar las partidas destinadas a la producción en 2016, 2017 y 2018, dejando que el dinero del cine se devalúe sin utilizarlo, el ejecutivo del INCAA está acelerando los gastos superfluos para dejar las cuentas vacías el 10 de diciembre. Entiéndase por gasto superfluo todo aquel que no está priorizado por la Ley de Cine. Esto también es desvío de fondos públicos.
EL 4-10, la comunidad audiovisual de todo el país convoca a sus representantes en la Asamblea Federal a hacer oír su voz: DIGAMOS NO Y EXIJAMOS TODOS LOS NÚMEROS DEL INCAA.
MESA DE DIRECTORXS DE CINE.